Plasma rico en plaquetas. Conoce todos sus beneficios
En la sangre, se encuentra millones de plaquetas capaces de regenerar nuestros tejidos. La gran cantidad de factores de crecimiento contenidos en los gránulos plaquetarios estimulan la cicatrización, la regeneración celular, aumenta la formación de nuevos vasos sanguíneos, activando el organismo donde se liberan ayudando a reconstruir el tejido dañado.
Estudios realizados han demostrado que esta técnica produce un aumento del grosor y la calidad de las diferentes capas de la piel con un incremento en la cantidad y la organización de las fibras de colágeno y elastina necesarias para sustituir las estructuras alteradas con el paso del tiempo.
Al extraerse los factores de crecimiento del propio paciente, se convierte en un tratamiento personal y seguro, evitándose cualquier tipo de efecto secundario grave secundario a infiltrar la piel, no hay rechazo, reacción alérgica o intolerancia y no tiene contraindicación para su uso.
Su uso terapéutico en dermatología tiene múltiples indicaciones: rejuvenecimiento, mejoría global de la calidad de la piel, aportando firmeza y luminosidad, cicatrices de acné, estrías, alopecia y acelera la curación de úlceras y quemaduras entre otras propiedades.
TRATAMIENTO PRP
Es una técnica ambulatoria sencilla que se realiza en consulta y el paciente puede reincorporarse a su rutina diaria después del procedimiento, basado en la aplicación intradérmica de plasma rico en plaquetas (PRP) para activar de forma natural las funciones del fibroblasto, la célula encargada de determinar la estructura y calidad de la piel. Es mínimamente invasivo y generalmente es suficiente con la aplicación de un anestésico tópico, pero si el paciente presenta una alta sensibilidad al dolor, se puede aplicar otra técnica anestésica.
El primer paso consiste en la extracción de sangre al paciente. Inmediatamente después, el profesional procesará la muestra en un equipo de centrifugación que separa los componentes de la sangre en capas para poder seleccionar la fracción más rica que es la que se inyecta.
Su aplicación se realiza a nivel intradérmico superficial, con agujas muy finas y pequeñas, en cualquier área cutánea que requiera ser tratada: rostro, cuello, escote, manos, cuero cabelludo….
Para obtener unos resultados óptimos, se recomiendan realizar varias sesiones anuales, siendo el profesional quien determine el número de sesiones necesarias, dependiendo del estado previo de la piel del paciente. Así mismo puede complementarse con cualquier otra técnica de rejuvenecimiento.
Tras el tratamiento, el paciente suele presentar un ligero enrojecimiento, inflamación, hematomas del área tratada, siendo visibles pequeños relieves en todos los casos que desaparecen en las 24 y 48 horas posteriores. El paciente, una vez pasadas 6 horas puede aplicar maquillaje
Este tratamiento se recomienda a partir de los 30 años, edad en la que la piel empieza a perder su poder de regeneración. Los beneficios de este tratamiento pueden ser visibles de forma inmediata aunque la mejoría es máxima aproximadamente a los 30 días, manteniéndose estable muchos meses. El resultado de la última sesión con plasma rica en plaquetas dura aproximadamente 1 año, momento en el que será necesaria valorar al menos una sesión de refuerzo.